Hambre

“el ruido de mi estómago es lo único que me da nombre”
- Paula Melchor

Y mira en qué me he convertido:
una criatura retorcida de hambre,
dientes limpios y vacíos,
escupiendo a las parejas,
perseguida por banderas burdeos
por toda la ciudad,
soñando un gato inmortal,
esperando instrucciones de arriba
que nunca van a venir
porque arriba no hay nada ni nadie,
viendo cosas que no existen
como el orden de la mente
o el final de la esperanza
y negándome a enterrar el telescopio
aunque me cueste la vida.